enero 14, 2025 admin
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Qué decirle a alguien que está experimentando ansiedad

La clave está en ofrecer apoyo, comprensión y un espacio seguro donde la persona se sienta validada. Aquí tienes algunas ideas:

«Estoy aquí contigo, lo que necesites.»

Asegúrate de transmitir tu disponibilidad. Que sepan que no están solos y que pueden contar contigo en cualquier momento. Esto les brinda una sensación de respaldo y seguridad en momentos de vulnerabilidad.

«¿Cómo puedo ayudarte ahora?»

Cada persona experimenta la ansiedad de forma distinta. Preguntar cómo puedes ayudar es una forma de respetar sus necesidades específicas, ya sea quedarse en silencio, ofrecer compañía, o ayudarlos a enfocarse en su respiración.

«Tómate tu tiempo, no tienes que apresurarte.»

Muchas veces, quien atraviesa un episodio de ansiedad se siente presionado por «volver a la normalidad» rápidamente. Recordarles que tienen tiempo para recuperarse sin prisa puede ayudarles a calmarse.

«Es normal sentirse así a veces. Estoy contigo.»

Validar sus emociones es crucial. Sentirse comprendidos puede aliviar parte del peso emocional que cargan en ese momento.

«Si necesitas hablar, estoy para escucharte.»

Abrir un espacio de conversación sin juicios puede ser muy útil. No necesitas dar soluciones; a menudo, solo escuchar con atención puede ser suficiente.

Qué NO decirle a alguien con ansiedad

Aunque nuestras intenciones sean buenas, ciertas frases pueden tener un efecto contraproducente. Estas son algunas que es mejor evitar:

«Tranquilo, no es para tanto.»

Aunque puede parecer un intento de consuelo, esta frase minimiza lo que la otra persona siente. En su lugar, intenta: «Entiendo que esto te afecta mucho, estoy aquí para ti.»

«Solo relájate.»

Si fuera tan simple, la ansiedad no sería un problema tan complejo. En lugar de esto, puedes ofrecer alternativas más empáticas: «Respiremos juntos un momento. Estoy aquí contigo.»

«No pienses tanto.»

Es fácil decirlo, pero difícil de aplicar en un estado de ansiedad. Intenta redirigir el enfoque preguntando: «¿Qué está pasando por tu mente ahora? Cuéntamelo si quieres.»

«Siempre te pones así.»

Evita comentarios que hagan sentir a la persona culpable o inadecuada. En lugar de eso, muestra empatía: «Lamento que te sientas así. Vamos a encontrar una forma de superarlo juntos.»

«Es todo cosa de tu cabeza.»

Aunque los pensamientos pueden desencadenar la ansiedad, esta frase invalida su experiencia. Sustitúyela por: «Sé que lo que sientes es difícil. Estoy aquí para apoyarte.»

Conclusión

Apoyar a alguien con ansiedad implica principalmente ser un punto de apoyo seguro. Con un enfoque basado en la escucha, la validación y la empatía, puedes ayudarles a sentirse menos solos en su lucha. Además, recuerda que sugerir la ayuda de un profesional de la psicología puede ser una excelente opción para abordar las raíces del problema.

Tu rol no es resolver su ansiedad, sino ser el puente que los conecte con un espacio de calma y comprensión. 💙

A terapia con Míriam

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